Hoy en día, el uso de tecnología es crucial para el desarrollo de cualquier empresa que quiera mantenerse a la vanguardia y a la par de sus competidores en la industria.
En el campo empresarial el uso de la tecnología aporta herramientas que permiten masificar la producción y generar rentabilidad económica, lo que se convierte en una excelente ventaja competitiva para las empresas.
La tecnología proporciona valor agregado y marca la diferencia, ya que les permite disponer de una gran cantidad de recursos, productos, soluciones y servicios que inciden en su posicionamiento haciéndoles competitivos y destacados en el mundo globalizado de los negocios.
Sin embargo, muchas organizaciones desconocen exactamente cómo pueden obtener ventaja competitiva, luego de invertir en soluciones tecnológicas para su empresa.
Bien, en este artículo abordamos los principales beneficios de la tecnología para aumentar la productividad, mejorar los procesos productivos, reducir costos y fortalecer las relaciones de mercadeo con los clientes. ¡Así tendrá una mejor idea de cómo utilizarla a su favor!
El uso de la tecnología ayuda a las empresas a cubrir de forma sencilla y eficiente las necesidades esenciales que se originan en el día a día dentro de sus operaciones. Además, les permite optimizar procesos manuales que implican un mayor gasto de tiempo y dinero.
La tecnología siempre ha estado ligada con las actividades empresariales con el fin supremo de incrementar los procesos productivos internos de manera confiable y segura, para que sus productos generen un mejor rendimiento económico.
La conectividad digital es un hecho impostergable e ineludible en estos tiempos modernos por parte de las empresas, y con mayor énfasis durante la pandemia del COVID-19.
La transformación digital es la vía para la supervivencia en los negocios, los cuales deben adaptarse y realizar las debidas inversiones tecnológicas para su mejora continua, lo que representa una ventaja competitiva con sus adversarios.
Hoy en día, en el mundo empresarial se utilizan un gran variedad de herramientas para brindar soporte técnico y administrativo a las diferentes áreas de las organizaciones. Además, muchas se implementan con el objetivo de mejorar procesos que necesitan ser más eficientes.
Algunas de las tecnologías empresariales más destacadas son las siguientes:
Ahora bien, a ciencia cierta, ¿cómo el uso de la tecnología puede ayudar a las empresas a mejorar su posicionamiento en el mercado y generar mayor ventaja competitiva?
Para entenderlo mejor, a continuación detallamos algunos casos de uso:
El uso de herramientas digitales facilita la elaboración de organigramas y data de los trabajadores existentes y vacantes, así como las funciones, responsabilidades, roles e interrelaciones en todas las áreas operativas y administrativas.
Disponer de la planificación extendida, relacionada con todas las actividades de los procesos productivos asociados a la cadena de valor de una empresa, permite su optimización y máximo rendimiento.
Las herramientas más eficaces y de uso global son las plataformas digitales sencillas, que permiten comunicarse de manera integral con proveedores, clientes y empleados. Además, que ofrecen una visión global de cada etapa de su negocio que pretenda mejorar.
Para mantener y aumentar la fidelidad de los trabajadores, es pertinente establecer mecanismos tecnológicos para su supervisión continua. Esto se puede hacer a través de un sistema de evaluación objetiva sobre las metas establecidas, que además permita la promoción del desarrollo de carrera del talento humano.
Disponer de manera oportuna en formato digital de los datos empresariales relacionados con ingresos, egresos, indicadores de gestión, proyecciones, informes y encuestas de opinión en momentos decisivos, facilita el camino y sirven de soporte para valorar una decisión.
Para competir en la era digital es necesario implementar un cronograma que facilite el camino hacia la transformación. Para ello, le presentamos tres momentos o etapas decisivas de su implementación:
Asumir de manera consciente que la tecnología va a influir en los modos y medios de producción de la empresa, y que esto va a generar grandes cambios que deben ser muy bien manejados antes de su implantación. Estos deben ser vistos como una necesidad de crecimiento y desarrollo.
Etapa 2: Estrategia de implantación
Consiste en determinar cuáles sistemas tecnológicos se insertarán y su compatibilidad con los existentes. Estas nuevas facilidades deben ser amigables y de fácil uso para evitar riesgos y amenazas en la continuidad operativa. Deben indicarse las fechas de inicio y culminación de esta etapa.
Etapa 3: Seguimiento y evaluación del proceso de transformación digital.
Para esta fase, es necesario establecer los indicadores que medirán el éxito del nuevo sistema que tiene como fin mejorar la productividad, eficiencia, seguridad y satisfacción de los usuarios. Este proceso requiere de una valoración continua, y para ello se establece un canal de comunicación con los usuarios, tanto internos como externos, para conocer los aspectos a mejorar.
Además de las ventajas mencionadas, la tecnología ofrece grandes oportunidades a las empresas de mejorar sus indicadores de productividad y rentabilidad a partir de la mejora de sus procesos.
A continuación los rendimientos esperados que representan una ventaja competitiva:
¡Hemos llegado al final!
Como ve, la tecnología es un recurso imprescindible para las empresas de hoy en día, especialmente en situaciones de crisis, crecimiento y recuperación. Por ello, es primordial que considere nuevas soluciones para su empresa que optimicen los procesos que ya ha establecido y además generen mayor ventaja competitiva en su industria o sector.
Si le interesó este tema y quiere conocer más sobre los desafíos que debe tomar en cuenta para migrar a un entorno laboral inteligente y digital, lo invitamos a leer nuestro artículo "Gerencia de transformación digital: 6 desafíos que enfrenta y cómo superarlos".